Tomado de Diario El Comercio

En el concurso. El coro del Conservatorio se presentó el martes. Mario Egas /EL COMERCIO

El canto es el sueño y diversión de 7 niños y jóvenes de un coro

Los nervios y la emoción se apoderaban de los niños coristas el martes en la tarde. Ese era el primer día del festival de coros infantiles organizado por el Conservatorio Nacional de Música en Quito.

A pesar del frío, los pequeños repasaban en las afueras del teatro del Conservatorio las canciones que habían sido ensayadas en sus colegios durante semanas.

Pero los repasos no solo se realizan en sus planteles. Para una presentación es necesario que los chicos realicen ejercicios en casa. Así se prepara Nicole Nieto, de 11 años, para sus presentaciones con el coro infantil del Conservatorio.

Diariamente ensaya en su hogar para afinar su voz. Ella es soprano dentro del coro y está feliz. De esa misma forma se siente Debbie Alberca, del colegio femenino Spellman. Ella cuenta que toda su familia asiste cuando tiene una presentación y eso, más allá de ponerla nerviosa, la alienta a seguir adelante. Ella practica frente al espejo y su madre, según Debbie, la ayuda a mejorar su postura ante el público.

Para Estefanía Gaona, el apoyo familiar es de suma importancia, pues en un futuro quiere ser médico y también dedicarse a la música. “Me gusta cantar y formar parte del coro, es emocionante”.

Pero Paola Tene, del colegio Gran Colombia, sueña con ser cantante profesional. A sus 15 años ha decidido dar los primeros pasos en este campo ingresando al coro de su colegio. Ella cree que el canto es una forma de transmitir sentimientos a las personas y para eso hay que prepararse. Lo mismo cree Alison Molina de 9 años. A ella le gustaría ser cantante y presentarse ante muchas personas en grandes escenarios.

Aunque para Andrés Ramírez, de 8 años, este es un pasatiempo que lo distrae y le ayuda a expresar emociones y sentimientos.

Alison Molina. La pequeña de 9 años quiere ser cantante.
Andrés Ramírez. La música es un lindo pasatiempo para él.
Nicole Nieto. La pequeña viene de una familia de músicos.
Estefanía Gaona. Cree que la música y el canto es emocionante.
Debbie Alberca. Ensaya diariamente frente a un espejo.
Johana Vélez. Aún siente mariposas en cada presentación.
Paola Tene. Anhela ser una cantante profesional.